Casa Coleone se presenta como una atractiva alternativa para una joven familia que cree en la restauración de la ciudad y sabe que las distancias son importantes. Además les permite personalizar su casa según sus intereses. El uso de pisos de demolición y maderas nativas son elementos que las inmobiliarias no ofrecen en sus casas nuevas. La restauración acompañada de una gran voluntad, permite marcar una gran diferencia en ese sentido, obteniendo un producto personalizado de valor único.
La ampliación y renovación de esta casa me entrega la oportunidad de emprender un interesante desafío, ya que la casa ya cuenta con una clara intención arquitectónica. Casa Coleone se protege del sol por medio de gruesos aleros de madera en todo su perímetro, además de parquet y una generosa planta de primer piso. Estos elementos, que están en buenas condiciones para ser recuperados, me dieron la pauta a seguir en su desarrollo.
Un obscuro lugar central de la casa se transforma en el eje vertical, articulando la comunicación con el segundo piso por medio de una escalera flotante, la que permite que la luz proveniente desde la lucarna llegue al primer piso. Este espacio, que recibe el sol directo todo el año, se convierte en una suerte de invernadero, la que contribuirá térmica y lumínicamente. Los nuevos aleros en el segundo piso darán la protección necesaria en verano.
Su construcción parte en octubre y su superficie final será de 180m2.
